La historia invertida
3. Fin
Yo tengo ciertos principios que no me gusta andar transando. Como por ejemplo, si alguien me cae mal, lo encuentro tonto, fome, latero, etc, jamás le doy cuerda, no puedo ser cínica y dejar q esa persona crea q le tengo la mejor onda del mundo. Y la verdad es que conozco mucha gente que pela a otros y luego se hace el súper simpático y la cuestión. Por otro lado, cuando la gente es media tonta y tiene actitudes odiosas por tratar de ser exageradamente agradable, yo voy y derechamente le digo que, por sobre todas las cosas, detesto a la gente sobadora de lomo, es anormal estar de acuerdo siempre con todo, es imposible que a uno le parezca correcto absolutamente todo lo que otra persona dice, por lo tanto, me molesta que exista la gente así. Esa gente no aporta nada. No sirve. O bueno, sirve para satisfacer las necesidades egocéntricas de quienes adoran llamar la atención.
Hoy tuve que conversar con alguien que me parece muy desagradable por ese motivo. Porque anda pelando a otros que le parecen torpes, pero se aprovecha de ese tipo de gente cuando algo le pasa y le conviene. Mientras hablábamos, sonó su celular y tuvo una pequeña charla con alguien que le conseguiría un mecánico para su auto, y luego fue muy despectivo para referirse a ella, inclusó deslizó un comentario aún más desagradable: "esta tonta jura que algún día la voy a pescar en serio."
-no te parece un poco desagradable tu actitud con esa niña?
-tu encuentras?
-Obvio, si te carga tanto, para que la pescas
-bueno porque me hace favores.
-me parece pésimo andar relacionándose así por el mundo. ´
Lo más loco de todo esto, es que le dio lo mismo mi comentario y siguió hablando mal de la tipa como tratando de justificar su actitud desgraciada. Y además yo andaba como con 50 grados de temperatura y el mundo se veia ridículamente cinematográfico a esa hora de la mañana.
2. Segunda parte.
Mi cabeza está como el globo de anacín. Apretada y triste. Ayer era mi último día en la pega 2, luego de que me consiguiera feriado jueves y viernes para sacar a pasear a mi Loop por sus vacaciones de invierno.
En la tarde me sentí mareada, vomitiva, y desfilé hasta la consulta del doc que hay en mi pega. No estaba. Me devolví a mi oficina y ahí me quedé platicando con un niño mexicano de intercambio que es padrísimo y me da chocolates mexicanos. Una hora más tarde mi cuerpo dejó de obedecer mis órdenes y, haciendo un esfuerzo máximo, llegué a la consulta del doc otra vez. Ahí estaba él, pero súper ocupado y yo, imposibilitada de caminar las 3 cuadras a mi oficina denuevo, me senté a leer una revista con el horóscopo del año 1999.
-da mala suerte leer horóscopos atrasados!
-yo estoy comprobando si las predicciones para ese año se realizaron al final
-y te acuerdas de las cosas que pasaron ese año?
-en realidad no.
Mi realidad se notaba alterada. Me senté en el escritorio de mi amiga Lorena, la auxiliar del servicio médico, a esperar por el doc. Como me estaba poniendo medio odiosa por la espera, ella me enseñó a tomar la presión con la cuestión esa que se infla y el estetoscopio y los latidos y la lesera. Multichori. Aprendí algo nuevo.
Él doc salió de su consulta a ver a su perro que lo esperaba en su camioneta 8x16 estacionada afuera. Me vio sentada y llorosa.
-ahhh ya te saqué la foto, espérame un ratito.
Y el ratito duró como 5 ratitos. Pasé a su camilla y ya, a esas alturas, mi percepción auditiva y visual me hacían ver gente verde caminando por todos lados.
-pero si tienes 58° de temperatura!
Me puso de guata en la camilla y clavó en mi trasero una gigantesca jeringa con muchos millones de penicilina, benzatina y un montón de cosas terminadas en ina. En realidad, fue la Lore la que tuvo que poner el pinchazo, toda tierna agarró mi pellejo y decía "si te estoy pasando el algodón con agüita no más"
Claro, SEGURITO. Ternura extramultichori de amigas.
De más está comentar que mis dos días de vacaciones se convirtieron en reposo absoluto, que por supuesto, no he respetado hoy. Las cosas ABSOLUTAS son como el opus dei. Y a mi lo absoluto me da lata de espantapájaro.
3. Primera parte.
Andaba contenta el miércoles, porque jueves y viernes tenía libre y había invitado a la Loop a ver Charlie y la Fábrica de Chocolates. Mientras avanzaba el día, mi cabeza se mareó y mis pulmones empezaron a moverse independiente al resto de los órganos internos. Todo mal.
Alguien, a quien quiero mucho, se va a Haití.
Misión de paz, dicen. Paz Armada?, digo. Sonrisa. Si yo entiendo, no soy tonta. Pero me molesta que se vaya. Me entristece. A Haití.
Haití.
-contento?
-nervioso
-llorará?
-creo que sí, soy muy llorón.
-yo le deseo mucha pero mucha suerte
-así tanta?
-asi toda.

Este Principito ira volando hasta la Misión de Paz
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